¿Ir más lento, para llegar más lejos? Cuando la adicción a la velocidad y la prisa son formas de huir de uno mismo
La velocidad, que funciona casi como una droga, ya que cuesta muchísimo dejar una existencia híper estimulada
En las últimas semanas, tuve un enorme honor: conocer a Carl Honoré, autor del bestseller Elogio de la lentitud y Elogio de la experiencia, referente global del movimiento slow. Fue invitado a la Universidad del CEMA a mantener una entrevista con Fernando Troilo, consultor y profesor de Recursos Humanos, y me di el gusto de saludarlo, intercambiar libros y hasta recibir una invitación para visitarlo en algún momento en Londres.